domingo, 8 de junio de 2025

                         Ruta a las Casa-Cuevas  de Bobastro

El pasado domingo 1 de junio de 2025 organizamos una ruta por el arroyo del "Granao" para ver una casa-cueva del mismo nombre. Serpenteando por la carretera de El Chorro, llegamos al primer puente que sube a la Mesa de Villaverde, eran las primeras horas del día para evitar los perniciosos rayos del sol del estío que comienza. Las Danas de marzo han provocado un tapón de maleza y troncos sobre este puente provisional, que como no lo limpien las futuras avenidas de agua pueden provocar el colapso y su destrucción.

Para acceder al arroyo y empezar la ruta tuvimos que salvar un pequeño talud. Un obstáculo superado con nota.


 Las frescas sombras de la mañana nos envolvían. El lecho del arroyo con las lluvias está muy limpio y todavía en algunos tramos el agua discurre cristalina y cantarina.




Aunque en la ribera se pueden observar los estragos y el ímpetu de la naturaleza desatada.




El trayecto estaba salpicado de una amplia gama de colores y tonalidades, que hacia aún más grato el paseo.







...y al final, la recompensa. Objetivo cumplido. 


Desayuno a los pies de la cueva y foto para inmortalizar a los participantes.



....y en el otro lado, panorámica de la casa-cueva en todo su esplendor.



La cueva del Granado, está situada en un margen del arroyo del mismo nombre, entre el Monte Público y la parte baja de las tierras del Huerto Franco. La construcción principal data del siglo XIV ó XV, o sea de época nazarí. Algunos restos encontrados indican su ocupación medieval , que se prolongará en el tiempo. Aunque consta que después de la Guerra Civil ya estaba deshabitada. También sirvió como refugio de pastores. Las manchas negras y pegajosas que se observan en las paredes, son restos de cera y humo que caían del techo de la cueva, que con el tiempo se han cristalizado, ya que allí había unas colmenas salvajes que todos los años se castraban para sacarles la miel. Cuentan que un año llovió tanto que la familia que entonces la habitaba, estuvo varios días aislada porque no podía cruzar el arroyo del agua que llevaba.

...Y después vuelta a casa por el mismo camino, con la satisfacción de haber subido un peldaño más en esta ya larga trayectoria de senderismo, cultura y amistad.


Crónica: Juan Duarte Berrocal

Fotos: Mariangeles Vera Rivero y Juan Duarte.