lunes, 22 de abril de 2024

 Crónica de la excursión al Castillo de Turón


En el año del nascimiento de Nuestro Señor de 2024, 2062 de la Era Hispánica, a 7 días del

mes de abril acontecieron los fechos de la narración que se sigue:

A la hora tercia (9:00) la mesnada se ayuntó bajo los estandartes de HARCA, acudiendo a la

llamada de su capitán, Don Juan Duarte en el lugar acordado, junto a la puente de la Molina a

orillas del río Turón -otrora frontera permeable entre el Reino de Castilla y el Emirato de

Granada-. Allí se unieron algunos aventureros que no forman parte de la mesnada de HARCA,

pero que no quisieron perder la oportunidad de participar en aquella gesta tan señalada.



Presentóse Don Francisco Ortiz, hombre docto, sabio del lugar y trujamán de textos latinos

y arábigos. Antes de comenzar la marcha al castillo ilustrónos el sabio sobre la antigüedad de la

puente que acabábamos de cruzar. Según contaban algunas personas, de las más viejas de la

vecina villa de Hardales, la puente se reconstruyó en el siglo XIX. Otrosí según otros

manuscritos conservados en los archivos se sabe que la dicha puente se restauró otra vez en el

siglo XVII. Por último, hay estudiosos que dicen que la obra original es del siglo II de la Era

Cristiana, de los reinados de los emperadores Trajano y Adriano y que por esta puente pasaba

una vía romana que comunicaba Iluro (Álora) con Flavia Sabora (Cañete), Arunda (Ronda) y

Acinipo. Esas vías existen hogaño, aunque después de 2000 años de funcionamiento están muy

modificadas. Son los actuales caminos de Teba, Cañete y Turón. Después de estas explicaciones

partió la hueste bien adereszada camino del Castillo de Turón.



Adistancia de unos cuatro tiros de ballesta (1’4 km) el grueso de la mesnada decidió hacer un

alto en la casa de Doña Pilar González, donde tuvieron oportunidad de yantar con tranquilidad

antes de acometer el asalto final a la fortaleza de Turón.



Una avanzadilla de la mesnada se adelantó hasta las faldas del castillo mientras el grueso

permanecía yantando hasta quedar ahítos.

Non atrevióse la avanzadilla a intentar la toma del castillo, porque era en terreno muy agreste

y el enemigo podíalo defender bien solo con 5 ballesteros. Poco después ayuntose toda la hueste

junto al camino atendiendo a nuestra guía, Don Francisco Ortiz, que indicó el plan a seguir para

asaltar la fortaleza y nos mostró el camino más a propósito para llegar sin peligro hasta el dicho

castillo.



El dicho camino resultó ser una bellaca senda que en su último tramo tornábase en una sañuda

cuesta imposible de subir si hobiese estado bien defendida. Una vez llegados al muro de la

barbacana, Don Francisco Ortiz, clarísimo varón, procedió a contarnos la historia pasada del

castillo. En este punto tengo que señalar que fue parco en datos non haciendo uso de toda su

sabiduría, mas non quiso extenderse en demasía por no cansar al grueso de la hueste. La relación

resumida de los hechos es esta que se sigue:



-1330. Conquista cristiana de Teba. Se convocó una cruzada contra Teba capitaneada por el rey

Alfonso el Onzeno de Castilla. Vinieron cruzados de Portugal y hasta de Escocia. Un caballero

escocés llamado James Douglas se dirigía con su mesnada a Tierra Santa a depositar el corazón

de su señor el rey Roberto Bruce en la Iglesia del Santo Sepulcro de Jerusalén. Al pasar por

el reino de Castilla se unió a las huestes de Alfonso XI, con la mala fortuna de morir en una

batalla contra los moros cerca del río Guadalteba. Este caballero era tenido por el más valiente de

su reino, no en vano, unos años antes estuvo a punto de capturar al rey de Inglaterra Eduardo

III en una batalla. Volviendo a nuestra historia, el dicho James Douglas murió al atacar de

forma imprudente a los moros, cayendo en una trampa provocada por una maniobra de tornafuye.

Non le iba a la zaga en valentía el comandante del ejército nazarí, el general Utmán, guerrero

meriní venido de Marruecos que era el que realmente gobernaba Granada. Se presentó con el

ejército de socorro nazarí y se estableció en el Castillo de Turón, desde donde se encargó de

hostigar al ejército cristiano que cercaba Teba. En una de esas incursiones murió James

Douglas. Los demás escoceses recuperaron el cadáver de su señor y tras hervir el cuerpo se

llevaron los huesos de retorno a Escocia. Poco después, Utmán enfermó y murió cuando se

trasladaba desde el campamento de Turón hacia Málaga. Finalmente, Teba se rindió a Alfonso

XI. Durante el cerco se habían dado intentos de asalto con máquinas de asedio, pero al final se

rindió por hambre.



-1362. El Castillo de Turón es conquistado por el rey Pedro I el Cruel en una campaña de apoyo

a un emir nazarí que teníase por su vasallo.

-1368. Los nazaríes recuperan el castillo reinando Muhammad V. Este emir emprende obras de

refuerzo en el castillo. Es el mismo que ordenó construir el famoso Patio de los Leones de la

Alhambra.

-1433. Es conquistado por el Adelantado del Andalucía Don Diego Gómez de Rivera, el mismo

que murió al año siguiente al intentar conquistar Álora, suceso recordado en el romance llamado

“Álora, la bien cercada”.

-1447. Los nazaríes recuperan el castillo.

-1449. El señor de Teba conquista el Castillo de Turón. Volverá a caer en manos nazaríes una

vez más.

-1464. Definitiva conquista de Turón y Hardales por Juan Ramírez de Guzmán.

La frontera quedó entre Ardales y Álora hasta la definitiva conquista del Reino de Granada

por los Reyes Católicos. El castillo, perdida su función militar, se acabó abandonando en el siglo

XVI.



Volviendo a la crónica que nos toca, la que narra los subcesos acontecidos en 2024 -¡¡Albricias!!

¡¡Por fin logramos penetrar en el castillo!!- Una vez dentro del castillo, fuele difícil a Don Juan

Duarte contener a la hueste, que non se dedicó al pillaje, porque non había nada que pillar, mas

algunos se desmandaron cuál caterva de almogávares y empezaron a subir por las peñas y las

torres.

Aquellos que mantuvieron la disciplina -recordando el triste final de James Douglas-,

acompañaron al sabio don Francisco Ortiz recorriendo el interior de la fortaleza deteniéndose en

los lugares de mayor interés. Descubriónos este sabio las escaleras secretas que conducían a lo


más alto de la peña. Para ello sirvióse de José Juan, cuadrillero de la Santa Hermandad, que

a la vista de todos los presentes recorrió los peldaños de la secreta escalera.

Condújonos el sabio después hasta el aljibe, enteramente colmatado por piedras, aunque en uno

de sus lados cortos podía verse la pared lisa con la obra de estuco pintado de rojo que

impermeabilizaba el depósito de agua. Non muy lejos de este lugar encontramos una lápida.

Tratábase de una piedra lisa muy blanca colocada a manera de lápida que podría marcar el

enterramiento de algún personaje. Hallamos la lápida rodeada por un círculo de piedras sueltas

que algunos visitantes habrían colocado allí por algún extraño motivo.



Desde allí, bajamos hasta la torre que tiene vistas a las huertas de Turón, hermoso paisaje

digno de contemplarse cuando no ha sido víctima de una de las habituales talas a las que fue

sometido el lugar en los pasados siglos. Desde la torre de ese lado de la muralla hay un agujero

por el que se ve el castillo de la Peña de Hardales. En aquel lugar, el capitán Don Juan Duarte

quiso inmortalizar el momento retratando a la hueste junto a la muralla de esa zona de la fortaleza.

Desde la muralla anduvimos hasta el agujero que lleva al “pasadizo secreto”, objeto de leyendas

del pueblo que afirmaban que era el comienzo de un túnel que llegaba hasta el castillo de la Peña

de Hardales. Otras leyendas menos exageradas, pero igual de falaces afirmaban que era un túnel

que llegaba hasta el río Turón. El pasadizo no tenía en realidad más de 20 metros, y actualmente

muchos menos al hallarse colmatado en el fondo. En la peña pueden verse unos mechinales que

sostenían una cubierta que cubría la entrada al pasadizo.

Después de esto, la mesnada emprendió la marcha de retorno a la villa de Hardales por el

mismo camino sin lamentar ningún incidente.

Salud e gloria tengan tan venturosos e distinguidos participantes que fueron presentes en la


jornada suso narrada.



Glosario de términos para un mejor entendimiento del texto:

Era Hispánica: Era que situaba el año 0 en el 38 a.C., supuesta finalización de la conquista

romana de Hispania.

Fechos: hechos

Mesnada: grupo de gente armada.

Ayuntó: juntó/reunió

Trujamán: traductor/intérprete

Hueste: ejército de campaña.

Hogaño: actualmente.

Adereszada: preparada

Yantar: comer

Ahítos: hartos

Tornafuye: maniobra de la caballería nazarí que fingía la huida para que el enemigo se

desorganizara en la persecución para a continuación volver grupas y atacar.

Meriní: dinastía que reinó en el territorio del actual Marruecos a la caída del imperio almohade.

Esta denominación se extiende a las personas originarias del reino meriní durante el período

que estuvo en el poder esa dinastía.


Joaquín Sánchez de Hardales Texto

Juan Duarte Berrocal: Fotos.

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